El Principio de la Cáscara de Huevo: De la Naturaleza a la Tecnología
Aunque la cáscara de huevo es delgada, no se rompe cuando la gallina está empollando.
Esto se debe a que su forma le otorga una firmeza estructural que puede soportar la presión. Un cascarón más grueso dificultaría que el pollito pudiera abrirse paso para salir.
El diseño de las bombillas eléctricas está inspirado en este "principio de la cáscara de huevo". Gracias a su curvatura, la fuerza que se ejerce al agarrarlas y enroscarlas se distribuye en todas direcciones, lo que evita que el cristal se quiebre.

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